lunes, 24 de diciembre de 2018

24D Max23kg

Está siendo un año extraño. Escribí este libro de relatos de ficción y poesía neurótica como ejercicio de sanación. Para dejar de ser la persona que era. Sin embargo, parece que 2018 me ha reconciliado conmigo, con todos los conmigos en los que habito. Cada una de ellas quiere desearos un años de coherencia, paz, y amor. Amor en su sentido más absoluto, y sin dramatismos, por favor.

jueves, 20 de diciembre de 2018

Max. 23kg en Anika entre Libros

Quiero agradecer a Ysabel sus palabras en Anika entre Libros, porque estoy de acuerdo con ella cuando dice que es necesaria una literatura más desnuda, aunque no sé si la mía lo es. Aquí tenéis el enlace de una reseña sincera: http://anikaentrelibros.com/max--23-kg


jueves, 13 de diciembre de 2018

Lo mismo y lo contrario, Benjamín Prado

Después de escucharle, me atreví a hacerle un regalo. Ojalá lo disfrute tanto y pueda devolverle algunas de las emociones que sus palabras y poemas ordenaron en mí.

(...) Hay verdades sin límite
y hay cosas que se acaban:
los ríos son Machado;
yo te amé a tumba abierta,
los alacranes brillan a la luz de la luna
y después son , de nuevo, venenosos y oscuros.
(...)

lunes, 10 de diciembre de 2018

10D, Derechos Humanos

Pág. 47 de Max.23kg. 
Si hablo y escribo brevemente sobre esta experiencia es porque así es la muerte en Colombia, hace mucho que dejó de ser algo personal, se convirtió en algo de todxs, y desde este lugar es que no podemos entender con nuestra mirada las historias del después. 

domingo, 21 de octubre de 2018

#otoño


Estoy en otoño. Empiezo a mirar mi cuerpo queriendo recordar como fue.
En el espejo mi sonrisa se vuelve complaciente, mis ojos se acercan más, y más, mi pupila colorea la ilusión que aún la hace brillar.
Mi vientre se asoma a la cintura, la trasciende, la rebosa como si del mismo mar se tratara, y mis pechos que deberían alzarse erguidos me recuerdan cada día a la adolescente que dejé de ser hace 40 años, han vuelto con su pueril encanto, con su timidez, a resbalarse sobre mi piel.
En este otoño me asomo a mis piernas buscando el poder que tuvieron. Esas que me han hecho andar por la vida, recorrer futuros impensables, levantarme de lugares que no existen, las que me trasladan por la cotidianidad, me dan el contacto on la tierra, me desplazan sobre mi universo.
Mis brazos apenas recuerdan la tersura de mis músculos, y sin embargo reconocen cada cuerpo con los que se fundieron, las cabezas que sujetaron, los corazones que amaron y se siguen fundiendo en ellos en todos y en cada uno.
Solo mi collar de Venus me lleva, remotamente, a la mujer que fui, y coqueto se sigue mostrando dispuesto, queriendo ser deseado, besado, amado.
Frente a mí trato de explorarme, como una tierra virgen y fértil, para no tener que recordarme y me encuentro en cada poro, cada nueva mancha que me aporta la edad.
Estoy en otoño. quiero encontrar el sereno equilibrio que mi mente puede darme. Solo se trata de eso. Soy mujer, quiero contemplar mi cuerpo y ver que el tiempo se deposita en mí con sabiduría y nostalgia.

sábado, 8 de septiembre de 2018

La noche y el caos forman parte de mí

La noche y el caos forman parte de mí, así comienza un poema de Pessoa, Anarquismo. Esta foto tomada en Santiago de Chile, desde un onceavo piso o más, en julio de 2012 representa  un poco eso. Por eso la puse, por eso la elegí para que estuviera en la solapa interior de Máximo23kg. Gracias a Luis Tadeo por captarme tan bien. Dicen que una imagen vale más que mil palabras, puede ser, pero ni siquiera esta es tan hermosa como el poema del que os hablaba al principio.

La noche y el caos forman parte de mí.
Me remonto al silencio de las estrellas.
Soy el efecto de una causa del tiempo,
del Universo [quizás lo excedo].
Para encontrarme, debo buscarme entre las flores,
los pájaros, los campos y las ciudades,
en los actos, las palabras y los pensamientos de los hombres,
en la noche del sol y las ruinas olvidadas de mundos hoy desaparecidos.
Cuanto más crezco, menos soy.
Cuando más me encuentro, más me pierdo.
Cuanto más me pruebo, más veo que soy flor
y pájaro y estrella y universo.
Cuanto más me defino, menos límites tengo.
Lo desbordo todo. En el fondo soy lo mismo que Dios.
Mi presencia actual contiene las edades anteriores a la vida,
los tiempos más viejos que la tierra,
los huecos del espacio antes de que el mundo fuera. (F.P)

lunes, 27 de agosto de 2018

Quilombo como parte de la creación

Algunas personas me están preguntando por qué Max.23kg no se vende en Amazon, o por qué lo hace solo en determinadas librerías. Bueno, es una pregunta que yo me hice, valoré y no me arrepiento de la decisión que he tomado.
No sé si conté que Máx.23kg surgió como un proyecto personal, un algo, esa espinita que llevaba y quise sacármela y para eso elegí a gente muy linda, muy profesional, con la que la vida me juntó. Parte del proceso de creación y edición de este libro era que Inma y Jose formaran parte de él, como dirían en una película: y este sentido soy irreductible.
A ellos les debo lo bonita que ha salido la criatura, lo corrigieron con esmero, cuidaron su edición, la publicación, los marcapáginas.
Yo creé un ser inteligente, ellos lo hicieron hermoso.
Así que ahora no iba a llevar a mi niño por esas ferias de barracas para que lo manosearan y lo trataran como a un vulgar ejemplar de páginas cosidas. No, tenía claro que iba a seleccionar cada uno de los lugares a los que iríamos, y Quilombo seguirá siendo nuestra opción favorita.
Gracias.
La librería Quilombo está en la Plaza del Pelícano, 8. Sevilla.

lunes, 13 de agosto de 2018

Kellepics: la mujer sobre el puente

Esta ilustración de Stefan Keller es lo que él llamaría una kellepics. Yo solo sé que desde que la vi la primera vez me enamoré de ella. Quienes hayáis ido a mis presentaciones sabéis que mi intención era usarla como tarjeta de felicitación, pero luego la vi...esa mujer, aparentemente frágil, en mitad de un puente entre la Tierra y no se sabe qué, habiendo llegado hasta allí y mirando hacia dónde puede seguir. La vi y me enamoré. Dicen que nos enamoramos de quienes admiramos. Yo qué sé. Lo único cierto es que al final se convirtió en una hermosa portada. La que tenía que ser. 

sábado, 9 de junio de 2018

tAn libRe coMo el cielo. Diego Alegre.

Esta es la foto que me regaló Diego una foto que con ese sol y ese azul podría ser la bandera uruguaya, pero es el cielo del país. Bajo ese cielo compartimos muchas tardes de mate (a pesar de que yo no lo bebo) y el viento se llevó nuestros planes y nuestros sueños. A Diego le debo las veces que me puso en mis sitio en la Rambla, le debo una disculpa por las oportunidades de crecer que desaproveché.
Gracias por verme y quererme libre, tan libre como el sol y el cielo de tu país. Libertad o muerte. Gracias.
(página 22 de @max23kg)

martes, 5 de junio de 2018

miércoles, 28 de marzo de 2018

Viaje. Gracias. Ariel.

Hay personas que llegan a mi vida y se marchan. Puede, que en algún momento llegue a reconocer por qué estuvieron. En cambio hay otras que solo sé el motivo por el que están cuando las tengo cerca. Esto último me pasa con Ariel Arango, el autor de esta hermosa fotografía. Sólo sé lo que nos damos si te siento cerca, y cerca casi nunca es a menos de 2000 kilómetros.
Quiero darte, públicamente las gracias por los viajes que tus imágenes provocan en mí, me refiero a esos viajes de adentro afuera y de afuera pá dentro que ya nunca desaparecerán. Esos viajes en los que exploro contigo, aunque no estés. Esa curiosidad que tu alma vieja provoca en mí.
Me siento feliz aún cuando no estemos cerca. Me siento feliz porque cuando no nos recordemos, yo miraré esta hermosa fotografía que me regalaste para @Máx.23kg y reconoceré porqué estuviste junto a mí.
Gracias.

miércoles, 14 de marzo de 2018

Gian, el hermoso regalo del azar

Hay gente que no cree en las casualidades, yo soy una de ellas. Yo andaba buscando una imagen hermosa, una foto que me llevara hasta las playas de Valizas, y encontré una divina, el único inconveniente era cómo había llegado hasta ella. Lo había hecho fisgando entre los amigos de mis amigos de facebook...no parecía ni principio muy honesto...y sin embargo, algo maravilloso sucedió...algo sorprendente ¡no era una foto de Valizas!  Aquí tienes toda la historia de esta hermosa fotografía y de este hermoso regalo que el azar me trajo.



jueves, 25 de enero de 2018

Claudio, la casa en el aire y el perro vago

Claudio tiene apellido de dibujante italiano, Marcoleta, y parece que vino predestinado a ello. Él es un niño, su voz, sus maneras, su mirada es la de aquel niño que fue y que la vida le quitó. Pero aún así él le acompaña y no deja que se vaya del todo.
Con Caludio hubo recetas de pasteles imposibles, abrazos de madrugada en las fiestas más secretas, Valpo, la luna sobre los Andes. Llegó a mi casa porque era amigo de mi compañero de piso y decidió quedarse para siempre, aún cuando yo me fui. Gracias, siempre habrá un perro vago y una casa en el aire que te traiga conmigo.

miércoles, 17 de enero de 2018

Ritmo latino, corazón africano, piel europea: Delphine Taylor


Tuve la suerte de encontrarme con Delphine en Barrancabermeja, Colombia. Y tuve la suerte de empezarnos a querer desde el principio. De piel tan clara como su alma y su mirada es la persona más tolerante, y sensible que he conocido en mucho tiempo. La envidio y admiro. Es medio escocesa, medio belga, medio francesa, y con venas latinas y corazón africano. Gracias Delphine por regalarme tu mirada sobre los campesios, hombres  y mujeres de Colombia con los que compratimos esperanzas. Gracias por formar parte de esos 23 kilos que traje de vuelta hasta Sevilla. En cualquiera de mis vidas te llevaré.

domingo, 14 de enero de 2018

Sirena de Okavango

Sirena de Okavango es el primer cuento de Máx. 23 Kg, y en realidad es el primer relato de un libro que se quedó (de momento) en el cajón y que se titula Savia. Lo interesante es que sea como sea, este debía ser el primer relato, porque es el que da origen a los demás. No es que es estén entrelazados o continúen las historias de los personajes, es simplemente porque el agua es lo que permeabiliza todas las historias. El agua, elemento yin casi absoluto, sobre la Tierra, en perfecto equilibrio hace que la vida, la escritura surja. Por eso este es el primer relato, porque a partir de él surgieron el resto de las historias.
Para los curisosos y curiosas, aquí tenéis una foto del delta del Okavango, es un lugar mágico, donde las sirenas recalan...a pesar de ser un delta, en pleno corazón de África, de agua dulce.

viernes, 12 de enero de 2018

Origen de Máximo 23 kilos

Como conté por ahí, el libro Máx. 23 Kg. lo escribí desde Latam. Son los relatos, las historias, los pensamientos y las palabras que aprendí mientras vivía en aquel maravilloso continente. Ha sido complicada la selección, pero como en la vida quería que hubiera de todo, pero sobre todo apostaba por el amor, en cualquiera de sus formas. Todo es amor. Y también hay risas, intriga, sexo, egos, dolor, soledad, aceptación, introspección, aprendizajes, posicionamientos políticos y vitales...porque, como dije por ahí, la vida está formada con ese montón de historias inconexas.

miércoles, 10 de enero de 2018

Raúl Sosa, ese flaco que habla a Pessoa


Puede que yo haya escrito cada historia de Max. 23 Kilos, pero no lo hice sola. Cada uno de los cuentos, de los pensamientos fueron en algún momento compartidos o cocreados con alguien, o para alguien. Así que cuando pensé en esta locura de publicar un libro y exponerme, también pedí permiso a algunos personajes que estuvieron conmigo.
Raúl es uno de ellos. Le conocí en Tristán Narvaja, un domingo nublado, cuando ambos cerrábamos bares. Aquella tarde que se volvió noche, acabamos compartiendo pan de semillas y nueces a ritmo de candombe por San Salvador. Desde entonces el ritmo no ha dejado de golpearnos. Idas y venidas por recuerdos, palabras de Pessoa, desquicies, escribanas locas, chacras al borde del mar, invitaciones a México, locuras de Ibiza.
Así es Raúl, así está en una de estas páginas. Él es escultor, actor, actor de doblaje, filibustero, artesano, dador de abrazos, de sonrisa y risa fácil, músico sin armonía, poeta, nomade, amigo. Gracias por estar.

martes, 2 de enero de 2018

Máximo 23 kilos


Este libro son las historias de aquellos 23 kilos que arrastré por Chile, Colombia y Uruguay, para traerlos de nuevo a Sevilla. Como la vida y mis propias maletas están hechas un batiburrillo, hay de todo un poco. He dejado hueco (pido perdón por la expresión a los chilenos) para que la gente con la que me fui encontrando, la que me crucé, la que desapareció, la que he tenido que buscar y de alguna manera los que no he encontrado estén acá también, con sus dibujos, sus fotos y sus aportaciones, porque la vida es un poco así, la haces con lo que sabes, lo que te enseñan, lo que te dan, lo que aprendes y ese montón de historias inconexas…y al final, un día, tienes que volver a comprar un billete..y la aerolínea te recuerda las normas: Máx. 23 kilos.